Ya se aproxima un nuevo año, y con él llegan los propósitos que nos plateamos cumplir en este nuevo año, pero una cosa es crear una lista llena de deseos y otra es cumplirla. Los propósitos no son fáciles de realizar pero si somos perseverantes y no nos rendimos podemos realizar metas que no nos creíamos capaz.
A continuación os vamos a ofrecer una lista de los propósitos de año Nuevo más comunes y unos tips para que cumpláis todas vuestras metas.
Los propósitos de Año Nuevo más comunes
- Hacer ejercicio
- Ahorrar dinero
- Colaborar en causas sociales o humanitarias
- Hacer algo bueno por alguien todos los días
- Encontrar pareja
- Dejar de tomar
- Comer más saludable
- Vivir con menos estrés
- Dedicar más tiempo a mis hijos/padres/abuelos…
- Viajar
- Ser más ecológico
- Visitar más a mis amigos y a mis familiares
- Leer un libro más que el año pasado
- Dejar de fumar
- Tener un ambiente recogido en casa
- Ser más positivo(a)
- Aumentar mi autoestima
Tips y planificación para cumplir tus propósitos de Año Nuevo
Cumplir los propósitos no es fácil pero tenemos todo un año para llevarlos a cabo, así que la primera regla es ser perseverante y si fallamos volver a intentarlo hasta que lo hayamos conseguido.
Los propósitos del Año Nuevo tienen que ser reales: tenemos que pensar en metas reales para que no nos sintamos frustrados al no poder conseguir nuestros objetivos al no tener las herramientas para ello.
Por ejemplo, si nuestro propósito es ir a residir al extranjero, como Londres, lo primero que tenemos que hacer es tener un colchón económico y saber hablar inglés. Por lo que el propósito tiene que ser primero ahorrar para pasar los primeros meses y hablar inglés con un nivel medio para poder encontrar un trabajo. Si ya tenemos el colchón económico y hablamos inglés es hora de lanzarse a la piscina.
Haz tu mapa del tesoro: una vez que tengamos pensado nuestra lista de propósitos es hora de plasmarlos en una lista o una cartulina grande, y complementarla con frases e imágenes que nos ayuden a cumplir las metas. Por último, guarda la lista o cuelga la cartulina en un lugar visible todo el año para que te acuerdes de tus propósitos.
Lo difícil lo primero: tendemos a huir de los propósitos complicados, y a veces, por eso mismo, acabamos dejándolos de lado. Por eso, esta vez comienza con los propósitos que te parezcan más complicados. Te sentirás más libre y los propósitos más fáciles te fluirán por sí mismos.
Dedícate tiempo: uno de los principales motivos por lo que no se llegan a cumplir los propósitos de Ano Nuevo es la falta de tiempo. Por esos es imprescindible dedicarnos tiempo a nosotros mismos y hacer el esfuerzo de encontrar pequeños huecos donde podamos realizar nuestros propósitos, por ejemplo, podemos ir al gimnasio a la hora de almorzar.
También es importante dedicarnos tiempo para reflexionar y escuchar nuestras necesidades y atenderlas. A lo largo del año podemos sentir la necesidad de abandonar propósitos porque no nos hacen felices o encontramos otros que nos hace sentir mejor.
Equivocarse es de sabios: cuando cometemos un error, o fracasamos, nos sentimos mal, comenzamos a desconfiar de algunas de nuestras capacidades o habilidades, y por último, nos enfadamos con nosotros mismos.
Pero fracasar o cometer errores indica que estamos aprendiendo e intentado cumplir unas metas, nunca hay que dejar de pensar en que podemos cumplir el propósito e ir a por ello. Si nos equivocamos, aprendemos de ello, analizamos nuestro fracaso y fallos, y una vez hecho eso tenemos que ir dejando de sentirnos culpables y arrepentidos. Es agotador y nos hace más daño del que creemos.
Celebra tus logros: los propósitos de Año Nuevo están pensados para hacernos sentir felices por realizarlos. No te fustigues por los propósitos fallidos de años anteriores, analiza en que has fallado, pero ante todo analiza que logros y metas has conseguido. Prémiate por todo aquello que sí conseguistes. No tenemos por qué esperar a cumplir el propósito para premiarnos, los progresos y avances también son importantes, son pequeños éxitos que merecen su celebración.
Divide en propósito en diferentes etapas: Cuando pensamos en un propósito a lo mejor lo vemos complicado, y lo descartamos por otro más fácil, pero no tiene que ser así. El truco para cumplir tu propósito es dividirle en fases o en etapas.
Pongamos un ejemplo, uno de nuestros propósito es comprarnos un coche. Muy bien, dividamos el propósito en diferentes fases: carnet de conducir, ahorrar dinero, encontrar el coche que te guste y comprarlo.
Como tenemos que conseguir el carnet de conducir y tener dinero para el coche, lo primero es conseguir un trabajo para ir ahorrando, más tarde nos apuntaremos a una escuela de conducir y realizaremos el examen teórico y práctico. Una vez hecha está fase y si tenemos el dinero ahorrado, solo nos quedara ir al concesionario para elegir nuestro coche.
También, tenemos que tener en cuenta la repercusión de cumplir un propósito, por ejemplo con la meta de comprar un coche, tenemos que tener en cuenta que tenemos que pagar un seguro, pasar la ITV…
Estos son los propósitos de Año Nuevo más comunes y los tips más eficientes para llegar a cumplirlos. No dejes de esforzarte y no te rindas, seguro que puedes lograrlo, se constante y no te fustigues por los errores o los fracasos, piensa en los logros que vas conseguido.
